” Tras la rehabilitación, ahorramos un 23% en consumo energético. Porque el precio del combustible puede variar, pero lo que nosotros hemos medido son los metros cúbicos consumidos. Todo se ha traducido en mejorar la calidad de vida de los vecinos”, explica Saturnino Saldaña, presidente de la Asociación para el ARI de Rio vena. Irene Olmos, presidenta de la Asociación de Vecinos de San Cristobal de Burgos, lo confirma. “Han sido 12 años de proceso, con varias reuniones con todas las comunidades de vecinos, pero lo que hemos conseguido hasta ahora es mejor calidad de vida y ahorro económico por el ahorro energético”, asegura Irene Olmos.
La experiencia de gestión del Área de Rehabilitación y Regeneración Urbana de San Cristóbal (Burgos) será uno de los casos de éxito que se presentará en el Congreso ITE+3R, de la Inspección Técnica de Edificios a la Rehabilitación, Regeneración y Renovación Urbana, se celebrará los días 23 y 24 de mayo en el Fórum Evolución de Burgos. Los responsables de la gestión y puesta en marcha de este ARRU van a explicar todo el proceso seguido para lograr que se convierta en una realidad y cuáles han sido los principales aciertos y dificultades que se han tenido que superar para lograr que se hayan ejecutado en los plazos establecidos. En su participación destacarán el modelo de participación público-privado desarrollado y el alto grado de consenso logrado a nivel de instituciones y de los vecinos involucrados.
Agustín Herrero Canal, arquitecto del estudio Canal A4 que ha dirigido el proyecto de regeneración que ha dado preferencia a mejorar la eficiencia energética de los edificios, actuando en su envolvente térmica tanto en las cubiertas y en fachadas, será uno de los ponentes. “Tras quince años de intervención, con 715 familias en el barrio Rio Vena a las que les ha cambiado la vida gracias a la iniciativa vecinal. Recuerdo cuando intentaba convencer de sistemas constructivos que por entonces eran muy extraños, envolventes térmicas que parecían complejas y hoy se están viendo por toda la ciudad y por otras de España. Con un sencillo sistema que es un SATE, un sistema de aislamiento térmico por el exterior de escasamente cinco centímetros de aislamiento, se mejoró la calidad de vida de estos vecinos”, explica Agustín Herrero. “Ahora, en el caso de San Cristóbal, hemos dado un salto cualitativo muy importante porque en quince años todos hemos aprendido algo, hemos evolucionado y estamos aislando con un sistema diferente ya que se ha apostado en los ultimas años mucho por la eficiencia energética y los sistemas constructivos han bajo de precio, pero las 685 viviendas de este barrio tienen en común con el anterior la iniciativa vecinal. Han sido los vecinos quienes han llamado a la puerta de las administraciones para ser ayudados y han demostrado que es posible”, explica el arquitecto del estudio Canal A4.